¡Hola Kireiafans! Hoy nos adentraremos en el fascinante mundo de la microcorriente. ¿Qué hace y qué no hace? ¡Descubramos juntas!
¿Qué hace la microcorriente? 💫
La microcorriente, esa pequeña maravilla, trabaja su magia para tonificar y reafirmar la piel. Es como un entrenamiento para tus músculos faciales, pero sin sudar. ¿Quién no ama eso?
Rejuvenecimiento Sutil: Brinda un toque de rejuvenecimiento, suavizando líneas finas y reduciendo la flacidez facial con el uso constante, es como un upgrade a tu masaje facial
Reducción de Inflamación: la microcorriente puede ayudar a calmar la inflamación, dándote esa sensación de zen que tanto necesitas haciendo que tu piel se va descongestionada y luminosa.
¿Qué no hace la microcorriente? 🚫
Ahora, aterricemos las expectativas para evitar decepciones. La microcorriente es increíble, pero no es una varita mágica.
No es un Lifting Instantáneo: Dale tiempo para hacer su magia. La microcorriente es más como yoga facial que una cirugía instantánea.
Resultados Graduales: No esperes resultados drásticos de inmediato. La consistencia es clave para ver esos cambios sutiles pero poderosos.
No Elimina Arrugas Profundas: Aunque es fabulosa, la microcorriente no hace desaparecer arrugas profundas. Para eso: skincare, skincare y skincare. Una rutina con hialurónico, retinol e incluso vitamina c puede ser tu mejor amiga, te sugerimos el uso de productos como Sérum nutritivo antiarrugas Strong, Sérum corrección y prevención de arrugas con CBD o el Serúm aclarante Glowy. ¡Se van a convertir en tus BFF anti edad!
La microcorriente es un juego de paciencia y amor propio. Es un buen auxiliar en el skincare, pero recuerda que si no tienes una buena rutina facial no podrás ver muchos resultados favorables: siempre hay que comenzar con lo básico y después puedes añadir aparatología adicional.